dilluns, 30 d’abril del 2012

Pregunta-Resposta




Todo el tiempo estábamos buscando algo obvio. –Le pellizca un pezón tan suavemente que Faye ni siquiera se da cuenta–. El mar sólo es el mar cuando se mueve –susurra Julie–. Las olas son lo que distingue al mar de un charco muy grande. El mar no es nada más que sus olas. Y todas las olas del mar terminan chocando con lo que ellas mismas empujan y rompiendo. Todo lo que estábamos mirando durante todo el tiempo que estuviste haciendo preguntas era obvio. Era obvio y era un poema porque éramos nosotras. Mira esa clase de cosas, Faye. Tu propia cara cuando adopta una expresión. Una ola que rompe sobre una roca y pierde su forma en un gesto que expresa esa forma. ¿Lo ves?


DAVID FOSTER WALLACE (1962-2008)
La niña del pelo raro, Random House Mondadori, Barcelona, 2011.